En Argentina un grupo de médicos le practicó un aborto  a una niña de 14 años que había sido víctima de violación. Posteriormente, dos jueces pidieron investigar este caso como un homicidio prenatal. Luego, Stella  Maris Martínez, defensora general de Argentina, pidió que se destituyera a los jueces que calificaron el aborto como un homicidio.

En Argentina el aborto sigue siendo un tema tabú. Por una parte colectivos feministas reivindican los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres. Por otra parte, hay grupos de médicos que se niegan a practicar abortos. El rechazo a la libre elección es tan grave que algunas mujeres han sido golpeadas por llevar el pañuelo verde. Recientemente se dio a conocer que jueces llamaron sicarios a médicos que practicaron un aborto a una joven de 14 años que fue violada.

Según las investigaciones del Ministerio Público de la Defensa y el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 8 de Buenos Aires, en septiembre del 2020 se detuvo a un hombre por cargos de abuso sexual y violación. El hombre de 35 años asesinó a otro hombre y abuso sexualmente de su hermana en diversas ocasiones desde que la chica era una niña. En 2017 la jovencita quedó embarazada, por lo que, decidió interrumpir su embarazo bajo la causal de violación. La menor fue  atendida en un hospital público y en todo momento estuvo acompañada por su madre. Recordemos que en Argentina se promulgó la ley que permite la interrupción del embarazo hasta la semana 14. Esta ley establece que se puede interrumpir de forma legal un embarazo si éste es producto de una violación o si la vida de la madre corre peligro.

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La joven aborto mediante la casual de violación. (Imagen: Pixabay)

Con respecto a la acusación de los jueces, durante el proceso legal los jueces condenaron por homicidio y abuso sexual al hombre de 35 años. Asimismo, abrieron un proceso de investigación contra los médicos que practicaron el aborto. Según su opinión habían ejecutado un homicidio prenatal. Dijeron que los médicos actuaron como sicarios o asesinos a sueldo. Esta orden llegó a oídos de Stella Maris Martínez, ella puntualizó que esta investigación estaba fundada en convicciones religiosas inadecuadas y pidió la destitución de los jueces.

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