Un menor identificado como Christian Giovanni falleció el pasado 1 de junio después de recibir un impacto de arma de fuego en Irapuato, Guanajuato. De acuerdo con testigos, un policía investigaba un robo en la localidad cuando arremetió contra el niño de 12 años y contra su hermano, de 17, quienes trataban de impedir el arresto de sus padres. Por ello, vecinos denuncian brutalidad policial.
Los sucesos tuvieron lugar el pasado 31 de mayo, en la colonia Ampliación Las Américas, Irapuato. Tal como lo han relatado algunos testigos y familiares de la víctima, elementos de la policía acudieron a una vivienda con el fin de investigar un robo. Presuntamente, una mujer había denunciado que la madre de los menores le había robado un tinaco.
Al ingresar al domicilio, los policías encontraron el objeto de la denuncia. Por ello, procedieron a detener a la mujer y a su pareja, aunque ellos aseguraban que no sabían que era robado y que habían pagado por él. Cuando los menores se percataron del arresto de sus padres, arremetieron contra los policías. Christian Giovanni lanzó una piedra contra una de las tres patrullas; como respuesta, uno de los elementos lanzó varias detonaciones e hirió a balazos a ambos hermanos.
Los menores fueron trasladados al hospital, donde Christian perdió la vida al día siguiente por una perforación en el riñón. De acuerdo con los padres arrestados del menor, los policías se intercambiaron de vehículo y rellenaron sus armas para que pudieran negar los hechos. En efecto, hasta ahora, la Secretaría Pública Municipal asevera que los policías no realizaron ningún ataque.
Por su parte, amigos, compañeros y vecinos de Christian han protestado frente a sus oficinas con leyendas como: “¡Policía asesino, mataste a un niño, mataste a mi amigo!”; asimismo, piden justicia para el menor. Al respecto, la Fiscalía del Estado asegura que ya se inició una investigación sobre los hechos.
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