Tras el brote del coronavirus en Wuhan y, posteriormente, en diversos países, comenzó a especularse acerca del origen del virus. Imágenes de la dieta de los residentes de la ciudad le dieron la vuelta al mundo, cuyos habitantes culparon al murciélago por el virus. Pero no, los murciélagos no causaron el coronavirus.
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En los días pasados no fue extraño ver en diversos medios de comunicación y artículos que el origen del coronavirus tenía un sólo origen y ese era el murciélago. Sin embargo, esto no es verdad, el mamífero no ocasionó la presente crisis de salud a nivel mundial.
Según un boletín informativo del Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Global no hay evidencia que relacione al coronavirus con los murciélagos como lo han señalado diversos artículos y pseudo investigaciones.
Rodrigo Medellín, investigador de la UNAM, señala que las noticias falsas y alarmistas sólo le provocan daño a una especie que es benéfica para los cultivos, pues los liberan de plagas, e inclusive interfieren en la dispersión de semillas de plantas y frutas. En cambio, el origen del virus tiene que ver con la intervención de los humanos en los ecosistemas animales.
“No estamos metiendo en lugares donde antes no llegábamos, donde hay patógenos que antes no nos afectaban, puede ser que alguien tocó una planta o acarició un animal o se lo comió y pudo estar infectado con este virus”. (Vía: UNAMGlobal)
En el caso de los murciélagos, el investigador responsable del Laboratorio de Ecología y Conservación de Vertebrados Terrestres del IE de la UNAM explicó que su desaparición traería más complicaciones de las que podríamos imaginar. Recordemos que una manada de estos mamíferos comen cerca de 10 toneladas de insectos cada noche, en consecuencia, sin su presencia diversos cultivos serían consumidas por insectos.
“De tal manera, si desaparecieran los murciélagos, en tres o cuatro meses se acabarían gran parte de las cosechas por las plagas de insectos. Asimismo, se perderían frutas como la guayaba y la ciruela, entre otras, ya que el murciélago es el polinizador de esos frutos o plantas”. (Vía: UNAMGlobal)
Tras esta aclaración podemos entender que no son las especies animales quienes están afectando a la especie humana. En cambio los seres humanos sí han alterado de una manera inimaginable los ecosistemas animales.
“Son las prácticas que se realizan en China y su proceso de utilización de fauna silvestre, se están exponiendo a diversos patógenos a los que antes los seres humanos no estábamos expuestos. Somos parte de un ecosistema y hemos invadido muchos, las especies que estaban ahí tienen más derecho de vivir ahí, protejamos a las distintas especies y su hábitat”. (Vía:UNAMGlobal)
El investigador concluyó recomendando a la sociedad proteger a los animales con los que conviven, pues seguramente nosotros invadimos su hogar primero.
Con información de: UnamGlobal