Desde que se anunció la construcción de una cuarta línea del Mexibús, se habló de que sería la obra más grande de transporte público del Estado de México. Esta conectará con la Línea 1 y la Línea 2, logrando así que este sistema por fin tenga interconexiones entre sí, dejando fuera sólamente la Línea 3 que pasa por Nezahualcóyotl. El único problema es que, hasta ahora, han pasado tres años desde que se anunció el inicio de los trabajos de construcción y siguen sin concluirse… y tampoco se tiene certeza de cuándo pueda inaugurarse. (vía: El Universal)
https://www.youtube.com/watch?v=eib80m8xalU
Este proyecto comenzó con Eruviel Ávila y se tenía estimado que estuviera concluído desde 2015, pero no fue así y ha llegado ya el 2018 sin que puedan inaugurar la línea o al menos asegurar que se completó el proceso de construcción. En mayo se hicieron pruebas operativas, pero organizaciones civiles denunciaron que estas se hicieron en sólo 15 kilómetros de los 24 que comprende la línea y no se hizo parada en estación alguna… porque ninguna está terminada (sí, en serio ni una sola). Durante esas pruebas se dijo a los pasajeros que el avance era del 35%, un porcentaje que tardaron casi tres años en alcanzar. Así mismo, Alejandro Palmerin, del equipo técnico de Transita Seguro, dijo que:
Este proyecto deja al olvido al peatón y el ciclista, siendo estos los usuarios más vulnerables de la vía. No vemos ningún beneficio hacia ellos por la implementación del corredor. A su vez se sigue pensando equivocadamente que los puentes antipeatonales son una solución idónea para tener acceso a estaciones o cruzar la vialidad. (vía: El Poder de Consumidor)
https://www.youtube.com/watch?v=u1_Dy-o83HM
Por su parte, el ahora gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, dijo que “para su puesta en marcha se han requerido diversas obras complementarias que no estaban consideradas originalmente.”; estas tienen un avance físico del 10%, por lo que aunque la contrucción de la obra principal se termine, faltaría que estas otras se completen para que pudiera operar este servicio de transporte. Incluso, se terminó antes el proyecto de Mexicable, que también tendrá conexión con la Línea 4, antes de que este pueda ver la luz como el flamante hijo de todas las administraciones que no han podido terminarlo.
Por ahora, la obra entorpece la circulación de las avenidas por las que su corredor pasa y también afectará a la CDMX cuando se hagan las conexiones con la Línea 1 y 3 del Metrobús en Deportivo 18 de Marzo y La Raza. Pero bueno, dicen que ahora sí, ya merito en la primera parte del 2018 queda listo (¿cuántas partes tiene 2018, por cierto?). (vía: El Universal)
