“El sádico, asesino de homosexuales” describió a detalle su modus operandi para secuestrar y matar a sus víctimas, sin embargo, insiste en que no los torturó.
Ante su entrevistadora Saskia Niño de Rivera, el preso Raúl Osiel Marroquín aseguró que estos hombres estuvieron tranquilos, pues “nadie los golpeó”.
En el podcast “Privadas de la libertad”, disponible en Spotify, “El sádico” recordó que asistía a bares gais de la “Zona Rosa”, en la alcaldía Cuauhtémoc, Ciudad de México (CDMX).
Ahí buscaba a sus víctimas, las seducía, los invitaba a su departamento y luego pedía el rescate a sus familias, por una libertad que nunca otorgaba.
Así se gestó la historia de Raúl Osiel Marroquín, uno de los asesinos seriales más famosos en la historia de México.
“El sádico” enfrenta una pena de 280 años en una cárcel de seguridad por cuatro asesinatos y 6 secuestros.
“Le hice un favor a la sociedad”
Expresó el criminal hace años.
Raúl asegura que era muy fácil seducir homosexuales pues “era atractivo” para ellos.
“Ciertamente sufrieron, los asusté, los tuve días secuestrados sin saber qué va a ser de ellos […] jamás les toqué un cabello, nadie nunca les tocó”
Admitió.
“El sádico” le contó a Saskia Niño de Rivera que amarraba a sus víctimas y las colgaba para terminar con sus vidas.
“Los ejecuté a través digamos de la horca, pero nunca los lastimé mientras estuvieron ahí los días que estuvieron ahí, estuvieron tranquilos nadie los golpeó, nadie les hizo nada”
Asegura.
Raúl Osiel Marroquín nació en Tamaulipas. Afirma que su infancia fue normal, con padres honrados.
Ya como adolescente se formó en el Ejército donde aprendió tácticas para “cazar” personas.
“Con quien me da mucha vergüenza más y por quien más me duele es por las familias, por las mamás, por los papás, por los hermanos, porque las víctimas ciertamente sufrieron, los asusté, los tuve días secuestrados sin saber qué va a ser de ellos”
Concluyó.
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