El Ejército Mexicano ha hecho un verdadero golpe al narco en Sinaloa, y no como el que recientemente anunció la Guardia Nacional, al revelar que aseguró más de dos mil litros de posible metanfetamina en laboratorios clandestinos en los municipios de Elota, Badiraguato y Cosalá.
La Secretaría de Defensa Nacional informó que el pasado 8 de junio elementos del Ejército llevó a cabo el aseguramiento de al menos siete laboratorios clandestinos utilizados para la presunta elaboración de droga sintética en la cuna del Cártel de Sinaloa.
El Ejército se distribuyó en los poblados de El Limón, El Mautal, La Bacata, La Carbonera y Alcoyonqui, así como en Los Cedritos de ambos municipios, en donde estableció un perímetro de seguridad para inhabilitar cada uno de los laboratorios que detectaron a través de una serie de trabajos de inteligencia.
En el primer laboratorio ubicado en El Mautal, en el municipio de Badiraguato, el Ejército aseguró 710 litros de sustancias químicas desconocidas almacenadas en 50 bidones de plástico; 200 kilogramos de una sustancia química desconocida de color blanco; 50 kilogramos de una masa con características propias de la metanfetamina en un recipiente de plástico; 16 tanques de gas; 11 reactores de síntesis orgánica; 10 quemadores; dos condensadores; dos centrifugadoras y un destilador.
En el segundo, ubicado en Los Cedritos, municipio de Elota, decomisaron 10 reactores de síntesis orgánica con capacidad de 200 litros, junto con dos condensadores y un destilador. De acuerdo con Proceso, el resto de los laboratorios incautados se localizaron en diferentes zonas del municipio de Cosalá.
En El Limón fue hallado el tercer laboratorio se encontró el cargamento de droga más grande: dos mil litros de una sustancia muy similar a la metanfetamina distribuida en en 16 tinas de plástico, además de 35 ollas de peltre con residuos de sustancias químicas desconocidas y dos reactores de síntesis orgánica con capacidad de 200 litros.
En La Bacata, en el cuarto laboratorio fueron hallados 400 kilogramos de sosa cáustica; 92 pinzas de presión; 17 cubetas con residuos de sustancias desconocidas; 13 tambos; 11 condensadores; nueve bidones de plástico con capacidad para 50 litros con residuos de sustancias químicas y una caldera, mientras que en el resto de los laboratorios, es decir, el quinto, sexto y séptimo, ubicados en La Carbonera, Alcoyonqui y Los Cedritos, en el municipio de Cosalá, únicamente fueron encontrados garrafas, tambos gigantescos y botes con residuos de sustancias químicas desconocidas.
***
Sigue la discusión masiva en nuestro canal de YouTube.