Tanto en el Estado de México como en la Ciudad de México (CDMX) aumentó la crueldad con que son ejecutados los feminicidios. Las mujeres son asesinadas mediante asfixia, son descuartizadas y sus restos dispersados en las calles. Expertas han señalado que no se trata de una psicopatía, sino de la normalización del maltrato y la violencia de género.
Recientemente los casos de feminicidio son ejecutados con mayor crueldad. Por ejemplo, Priscila fue asesinada por su esposo frente a sus hijos. En algunos casos, los feminicidas graban el asesinato y lo difunden en redes sociales. La crueldad con la que las mujeres son asesinadas parece cada vez más normal e insignificante para la ciudadanía. Ante esta situación colectivos feministas y activistas han realizado censos y estudios de la situación. Según sus investigaciones, se han registrado al menos 44 casos en diez años.
Uno de los municipios del Estado de México que han sido señalados como zona roja es Naucalpan. Allí dos mujeres fueron asesinadas y descuartizadas por sus parejas sentimentales. En la entidad hay al menos 500 niños huérfanos a causa del feminicidio. Consecuentemente, el Gobierno de México se vio en la necesidad de ofrecerles apoyos económicos. Muchas de esas niñas huérfanas también son vulnerables, recordemos que hace unas semanas una niña de 15 años Wendy, fue asesinada. Posteriormente, las amigas de Wendy cargaron su ataúd durante su cortejo fúnebre.
En los reportes periciales del Estado de México se ha establecido que los feminicidios incluyen lesiones como mutilaciones o desollamiento. En la última década se han ejecutado 30 casos consecutivos, estos presentaron violencia extrema. Expertas de la UNAM, señalan que la impunidad de los feminicidios le otorga a los agresores bandera blanca para asesinar mujeres. Se espera que las autoridades tanto de la CDMX como del Estado de México tomen medidas para prevenir y castigar el feminicidio.
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