Un hombre y padre de familia descubrió a su hijo jugando con el celular durante la madrugada y como castigo lo dejó sin dormir.
De acuerdo al portal británico Daily Mail, el sujeto identificado como Huang tomó una decisión inusual para enseñarle una lección de vida a su heredero.
Y es que el papá no lo quitó el celular, sino que obligó a su hijo a jugar videojuegos durante 17 horas ininterrumpidas.
El menor, residente de la Shenzhen, provincia de Cantón, China, no tuvo más remedio que manipular su teléfono en pijama y sentado en una silla.
“Entonces mi papá se enteró y me castigó. Me dejó jugar lo suficiente, hasta vomitar”, declaró el menor.
Además el pequeño dijo que su familia lo despertó varias veces durante la madrugada, pues se tomaron muy enserio el castigo que se convirtió en lección.
“De 1:00 a 18:00. Acabo de jugar durante 17 horas”, reveló.
Según admitió el señor Huang su pequeño rompió en llanto cuando el castigo terminó.
Lo valioso fue que el niño prometió reducir el tiempo que pasa jugando en el celular. Claro, todo después que su padre lo obligó a manipular el teléfono durante 17 horas.
No conforme el papá asiático grabó el castigo y compartió la historia en redes sociales, específicamente en la plataforma conocida como Douyin.
Huang se justificó y dijo a sus críticos que utilizó el método como última opción. Además desaconsejó a otras madres y padres que lo imitaran.
Sin embargo algunos usuarios expresaron en redes su desacuerdo y calificaron el hecho como violencia intrafamiliar.
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