El juez Miguel Ángel Gálvez decretó el auto de procesamiento al expresidente de Guatemala por su supuesto liderazgo dentro de la red de corrupción conocido como “La línea”.
La Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) le imputa cargos por asociación ilícita, cohecho pasivo y defraudación aduanera.
El antes mandatario mostró indignación y dijo “no entender” por qué tomaron tal decisión.
Permanece en prisión provisional desde el jueves pasado como medida para que permanezca ileso, pero la Fiscalía ha solicitado que se le transfiera a prisión preventiva para evitar el riesgo de una fuga.