En Ecuador un hombre fue testigo de como un grupo de delincuentes secuestró a su esposa y, en medio de la desesperación, le suplicó a los sujetos que mejor se lo llevaran a él.
Fue mediante redes sociales donde se dieron a conocer las imágenes del terrible hecho ocurrido en Santo Domingo el pasado 15 de junio, cuando una pareja iba llegando a su domicilio y segundos antes de cerrar el portón de su casa un grupo de delincuentes entró para cambiar la vida de la mujer y el hombre por completo.
? #CirculaEnRedes | "¡Llévame a mí, llévame a mí!", suplica hombre cuando secuestraban a su esposa.
— xevt – xhvt (@xevtfm) June 17, 2023
Los hechos abrían ocurrido en #SantoDomingo, #Ecuador
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Delincuentes secuestran a una mujer; esposo suplica que no se la lleven
En la grabación, que fue captada por una cámara de vigilancia del domicilio, se puede observar como una camioneta pick-up color negro llega a una casa, una vez estacionada dentro de la cochera, una mujer con vestimenta color rojo procede a cerrar el portón.
Sin embargo, antes de cerrar la puerta se puede ver como llega un Chevrolet Spark GT color gris, sin placas y con vidrios oscuros, del cual bajan cuatro hombres, todos con el rostro cubierto y uno de ellos con una pistola en mano.
La mujer desesperada le grita a su esposo: ¡Juan! y corre hacía adentro. Su marido que aún estaba en la camioneta se baja rápidamente, pero el delincuente con el arma lo intercepta y evita que se dirija con su esposa.
Los otros tres hombres van por la mujer y la sacan arrastrando del domicilio mientras ella les implora que no se la lleven: ¡Por favor, no!.

Al ver el hombre como los delincuentes secuestran a su esposa, mientras él no puede hacer nada, comienza a suplicarle al sujeto que lo tenía encañonado que no se la lleve y que mejor se lo lleve a él: ¡Llévame a mi!, le dice.
Desafortunadamente las suplicas no sirven de nada, pues los delincuentes suben a la esposa del hombre al vehículo y huyen, mientras que el hombre con el arma sale rápidamente del domicilio y se monta en una motocicleta para también huir del lugar.
Finalmente el sujeto se queda solo en la casa desesperado y suplicando que no se lleven a su mujer.
“¡Papito lindo, llévame a mi. Hijo lindo no se me la lleve!”, se escucha decir al esposo que vio como secuestraron a su esposa.
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