El presidente municipal de Apocada, Nuevo León, César Garza, informó a través de sus redes sociales que la niña Ana Roberta, de 3 años de edad, fue asesinada por su madre y su padrastro, y no raptada como lo denunciaron.
Este martes 27 de octubre, Ana Karen Estrada Cavazos, madre de la menor, denunció ante las autoridades el rapto de su hija Ana Roberta. La mujer declaró ante las autoridades que le arrebataron a la niña de sus brazos y llevaba con rumbo desconocido. Por esta situación, la Fiscalía General del Estado de Nuevo León, emitió una Alerta Amber para buscar y localizar a la niña.
Durante las indagaciones, los agentes dudaron de la versión de la madre sobre los hechos, quien comenzó a caer en contradicciones.
“Jefe hay un reporte de una señora que nos dice que le quitaron a su niña de sus brazos, pero en sus declaraciones es contradictoria. El perfil, psicológico no demuestra angustia si no pesar, como que sabe que ocurrió con la menor, voy para allá”, afirmó César Garza al referirse a lo dicho por Víctor Navarro, Secretario de Seguridad, sobre las primeras indagatorias del caso.
Una vez que las autoridades interrogaron a la madre y padrastro de la niña, identificado como Homero, ambos finalmente confesaron el asesinato de Ana Roberta.
“Sabes qué, jefe, este caso no suena bien. Sabes que las personas están dando datos de que efectivamente que la privaron de la vida. Arrojaron la carreola al arroyo y a la niñita la pusieron ahí en un monte”, menciona el alcalde en un video compartido en Facebook.
El miércoles 28 de octubre, encontraron el cuerpo de Ana Roberta en un terreno baldío a un costado del arroyo Topo Chico. De acuerdo con las autoridades, la niña presentaba lesiones en el rostro, estaba envuelta en una cobija, dentro de una bolsa de plástico negra.
Con información de César Garza Villarreal/Facebook
