Luego de casi un año del arresto con extrema fuerza de la mujer estadounidense Karen Garner, de 73 años, en la ciudad de Loveland en Colorado, los dos policías responsables de este abuso de autoridad fueron apartados de sus cargos.
Fue el pasado 20 de junio cuando el oficial Austin Hopp se lanzó contra la mujer que se encontraba recogiendo flores afuera de una tienda de autoservicio, ocasionando lesiones en el hombro, brazo y muñeca de la adulta mayor.
Con ayuda de su compañera Daria Jalali, los elementos de policía de Colorado llevaron a Garner a la estación correspondiente sin brindarle atención médica hasta seis horas después de su arresto.
Sin embargo, el caso era totalmente diferente a lo descrito por los policías. Karen Garner es una adulta mayor con problemas de demencia y afasia sensorial, que le impiden comunicarse adecuadamente. El arresto se llevó a cabo por una sospecha de robo en la tienda de autoservicio por un monto total de 14 dólares.
El supuesto robo no fue más que un descuido que ocasionó que la señora saliera de la tienda sin ser observada por sus familiares, quienes luego de la terrible experiencia procedieron legalmente contra los agentes.
Las maniobras de arresto policíaco han sido objeto de delitos mayores como la muerte por asfixia de ciudadanos como George Floyd o, en México, de Victoria, inmigrante que fue víctima de este tipo de agresión.
Austin Hopp fue acusado de agresión en segundo grado, mala conducta y delito menor; mientras que, Jalali fue señalada por no denunciar el hecho violento, no intervenir en este y mala conducta.
Los hechos quedaron grabados en la cámara corporal de Hopp y fueron la prueba irrefutable para aplicar la sanción, así lo informó el fiscal de Distrito Gordon McLaughlin, en una conferencia de prensa el día de ayer, 19 de mayo.
Con información de: Unilad
***
No te pierdas el mejor contenido de Plumas Atómicas en su canal de YouTube
