Un preso fue ejecutado por primera vez en 9 años en el estado de Mississippi, Estados Unidos, esto mediante la inyección letal. David Neal Cox, de 50 años, fue sentenciado a pena de muerte luego de matar a su exesposa y violar a su hijastra.
El hombre fue declarado culpable en 2012 luego de asesinar con disparos de arma a Kim Kirk Cox, su esposa con quien ya no convivía, y abusar sexualmente de la joven mientras la madre aún estaba moribunda. Medios como RT revelan que durante la sentencia, el sujeto se declaró a sí mismo como “merecedor de la muerte”.
Sin embargo, su ejecución no había procedido hasta este 2021 que las autoridades aprobaron aplicar la inyección letal. Para esto, Lindsey Kirk, la hijastra de David Neal, quien ahora tiene 23 años, presenció el momento en que el preso fue ejecutado desde hace 9 años desde lo ocurrido.
Según la versión de los hechos, Cox, irrumpió a la casa de su entonces esposa y tras dispararle en varias ocasiones, la dejó en el suelo moribunda, mientras tanto, violó en tres ocasiones a su hijastra quien para entonces tenía 12 años. Lindsey confesó a la policía que David Cox abusó de ella por varios años, pero no se atrevió a contárselo a su madre porque el sujeto la amenazaba con matarla junto con su familia; no obstante, fue hasta el 2009 que pudo decirle lo que ocurría con el entonces esposo.
Luego de hacer la denuncia y divorciarse, el hombre fue arrestado y acusado de violación de menores, agresión sexual, abuso infantil y posesión de metanfetamina; sin embargo, logró evitar un juicio y quedó en libertad para el 2010. Durante este tiempo se dispuso a buscar a la familia quienes ya se habían mudado y tenían una orden de alejamiento, hasta que pudo dar con su paradero y cometer el crimen.
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