El gobierno de la Ciudad de México presentó un nuevo protocolo que busca dar seguridad a manifestantes y policías durante marchas y protestas.
A partir de hoy, en todas las manifestaciones donde estén presentes integrantes de la Dirección General de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México, los elementos portarán un número identificador.
En la presentación del nuevo protocolo de actuación de la policía capitalina en manifestaciones y protestas, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad, Nashieli Ramírez, dijo que el personal policial no será sancionado si se niega a cumplir una orden inconstitucional y violatoria de los derechos humanos que le pida un superior.
Las y los policías portarán casco y escudo como equipo de protección.
Fuerza, con “perspectiva de género y no discriminación”
El subsecretario de Gobierno capitalino, Arturo Medina, añadió que “el mando responsable girará las instrucciones al personal policial para el empleo gradual y proporcional de la fuerza, siempre adoptando medidas diferenciadas con perspectiva de género y también de acuerdo al principio de igualdad y no discriminación”.
“Se privilegiarán las estrategias destinadas a reducir la tensión, basandose en la comunicación, la negociación y el diálogo”, aseguró Medina, quien dijo que, al inicio de la marcha, la estrategia de los policías será ubicar objetos que pudieran causar lesiones a terceros.
El secretario de gobierno de la CDMX, Alfonso Suárez del Real, dijo que el nuevo protocolo se estrenó, de manera informal, en la protesta del viernes 31 de julio, en la que colectivas feministas protestaron porque la Suprema Corte de Justicia de la Nación no aprobó un exhorto al Congreso de Veracruz para despenalizar el aborto.
“El proceso de encauzamiento final creo que tenemos qu eafirmar, es un momento que evidentemente tratándose de la Plaza de la Constitución, hay una serie de inmuebles que tenemos la obligación de proteger, tanto civiles como jurídicos y religiosos”, dijo Alfonso Suárez.
Para la elaboración del protocolo fueron tomadas en cuenta las opiniones del Frente por la Libertad de Expresión y la Protesta (FLEPS), el Congreso de la CDMX y la Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en México.
Con información de Animal Político y Forbes México.
Por Cris Pinto