Aunque el discurso en contra de los migrantes es una de las banderas del gobierno de Donald Trump, las remesas alcanzaron su máximo histórico en 2017. Este superó por 6.6% lo registrado durante 2016, antes de que el miedo, los discursos y los tweets trumpistas invadieran la agenda del gobierno norteamericano.
El mejoramiento del mercado laboral estadounidese en el que se encuentran laborando los inmigrantes mexicanos, junto al temor de las deportaciones masivas que promovió Donald Trump hicieron que el número de dólares enviados a México se elevara hasta 28 mil millones de dólares durante 2017. Alejandro Cervantes, economista de Banorte-Ixe, explicó a El Economista que:
Si consideramos que las remesas familiares son una modalidad de ahorro para los migrantes, el incremento observado en el flujo durante 2017 obedece también a la política antimigratoria de la administración de Donald Trump (Vía: El Economista)
El miedo a ser deportado hizo que los migrantes adoptaran prácticas de ahorro y mandaran esos ingresos a México, en espera de ser regresados en cualquier momento. Por esto mismo, se estimó que casi 1 millón y medio de hogares fortalecieron económicamente en 3.3% al hacer el cambio de la moneda a pesos mexicanos.
Las entidades que más recibieron de este, que es la tercera fuente de ingresos más grande del país (sólo tras la industria automotriz y agroalimentaria), fueron Michoacán, con 2 mil 915 millones de dólares, un 10.1 por ciento del total, seguido de Jalisco y Guanajuato, con 2 mil 797 y 2 mil 559 millones de dólares. (Vía: El Financiero)
El mercado de remesas, es una fuente importante de ingresos para muchas familias mexicanas. Esta dependencia de la economía estadounidense, al mismo tiempo que beneficia la posibilidad de compra de los mexicanos, representa una falencia en el sistema y el marco económico que tiene nuestro país frente a sus competidores, pues inclusive el dolar ha bajado a ser la cuarta fuente de ingresos del país.
Al mismo tiempo, el valor que representa cada dólar impacta más mientras el peso se siga depreciando frente a la moneda estadounidense, y con esa tendencia en mente y el gobierno de Donald Trump corriendo cada día que pasen allá los mexicanos, podrá hacer que ese récord suba.
