En cuatro meses, de febrero a mayo de este año, han desaparecido alrededor de 40 personas en Nuevo Laredo, Tamaulipas. De esas, según el Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, hay “fuertes indicios” que 23 fueron ‘levantadas’ por fuerzas federales.
#Comunicado Zeid @UNHumanRights urge a México a actuar para poner fin a la ola de desapariciones en Nuevo Laredo > https://t.co/g4YvD2m5Lr pic.twitter.com/sOeFpJ5lDQ
— ONU-DH México (@ONUDHmexico) May 30, 2018
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, hizo públicas las investigaciones de la dependencia a su cargo, que se apoyan en las recomendaciones emitidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y de organismos civiles y autónomos regionales:
“Se informó que muchas de estas personas habrían sido detenidas arbitrariamente y desaparecidas mientras realizaban su vida cotidiana. Es particularmente horrífico que al menos cinco de las víctimas sean menores, tres de ellas muy jóvenes, tan sólo de 14 años. Estos crímenes, perpetrados durante cuatro meses en un solo municipio, son indignantes” (Vía: ACNUDH)
MUY GRAVE denuncia del Alto Comisionado ONU
– 21 hombres y dos mujeres (3 menores de edad) han sido desaparecidos por fuerzas federales en Nuevo Laredo, Tamaulipas, entre febrero y mayo de 2018.
– Uniformados los detuvieron mientras caminaban o iban en carretera.Acá detalles pic.twitter.com/71izGRgxVz
— Peniley Ramírez (@penileyramirez) May 30, 2018
Aunque no se señala directamente a qué fuerzas federales se refiera el Alto Comisionado, las opciones en Nuevo Laredo son pocas: o la Marina o la Policía Federal, ambas asignadas a la ciudad fronteriza desde el 2010, cuando la violencia en Tamaulipas comenzó a salirse de control.
Apenas hace unos meses, se aprobó en el Senado la Ley General de Desapariciones en medio de críticas fuertes de la sociedad civil porque las bancadas del PAN y PRI desarticularon muchas de las demandas de organismos de derechos humanos, de familiares de víctimas y hasta recomendaciones internacionales (de la ONU, AI y otros organismos).
La ONU ha documentado la desaparición de 23 personas en Nuevo Laredo, estado de Tamaulipas, desde febrero de este año 2018. Varias de las víctimas apenas tenían 14 años. #Mexico https://t.co/z3UP9IKsUV pic.twitter.com/pUB4pKh43Y
— Noticias ONU (@NoticiasONU) May 30, 2018
Esta cruel coincidencia no pasó desapercibida para el Alto Comisionado:
“Es extremadamente preocupante que estas desapariciones forzadas se produzcan pocos meses después de la aprobación de la Ley General de Desapariciones. Lo que ha estado sucediendo en Nuevo Laredo es una prueba crucial para verificar si esta nueva Ley representa realmente el cambio que su adopción promete o si las desapariciones forzadas continuarán, seguidas de impunidad y falta de reparación a las víctimas” (Vía: ACNUDH)
Los señalamientos del Alto Comisionado podrían considerarse crímenes de Estado de ser comprobados por la justicia mexicana o investigados oficialemente por una Corte internacional), ya que fuerzas federales y no estatales o municipales (como ocurrió con los 43 de Ayotzinapa) son las posibles responsables.
Esto pondría en el banquillo de los acusados al Estado mexicano y al gobierno federal pues las acciones, de haberse cometido por “las fuerzas federales” durante sus horas de trabajo, serían responsabilidad directa del gobierno central. (Vía: Animal Político)
No deja de impresionar el dato de que más de la mitad de las desapariciones ocurridas en Nuevo Laredo podrían ser responsabilidad de las fuerzas federales, esas mismas a las que el Congreso y el Ejecutivo Federal les han encargado la Seguridad Interior luego de la aprobación de esa ley. ¿Quién vigila a quienes nos ‘vigilan’?