El narcotraficante Rafael Caro Quintero tiene una deuda pendiente con el gobierno de Estados Unidos por el asesinato del agente infiltrado de la DEA, Kiki Camarena, pero al menos por el momento permanecerá en México.
El Economista informa que a tres días de su detención el Juez Séptimo de Distrito de Amparo en Materia Penal en Jalisco, Francisco Reséndiz Neri, concedió una suspensión de plano al fundador del Cártel de Guadalajara impidiendo su expulsión a Estados Unidos, o al menos no sin que antes enfrente un juicio de extradición.
“Se concede la suspensión de plano, para el efecto de que no se ejecute y el interesado quede en el lugar donde se encuentra a disposición de este órgano jurisdiccional de amparo solo en lo que se refiere a su libertad personal, hasta que se resuelva el presente juicio de amparo”, determinó el juez con residencia en el penal Puente Grande, Jalisco.
La hermana del narcotraficante, Beatriz Angélica Caro Quintero, fue quien solicitó la medida cautelar luego de que argumentó que supuestamente el Gobierno de México pretendía extraditar a su hermano sin cumplir el procedimiento correspondiente conforme al tratado de extradición con Estados Unidos.
Sobre Quintero, aka El narco de narcos, pesaba una de las recompensas de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) más alta para un criminal, y tras pisar la cárcel por primera vez en 1985 por el brutal asesinato de Camarena… fue liberado en 2013 debido a un escándalo judicial. La DEA jamás le perdonó a Quintero el crimen y presionó a México para que lo detuviera. Nueve años después ha vuelto a pisar la cárcel.
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