Andrés Manuel López Obrador, próximo presidente de México, no ha parado de trabajar desde que le dijeron que ahora sí era en serio; una de sus promesas fue la austeridad, y aún con dudas, presentó 50 lineamientos para llevarlo a cabo.

Estos puntos incluyen varias de sus promesas más repetidas, con ese término extraño que es la Austeridad Republicana. Así mismo, se plantean acciones concretas para el ahorro y el combate a la corrupción a través del mismo.

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Para comenzar, AMLO explicó que ganará menos de la mitad del salario que percibe el actual presidente de la República, Enrique Peña Nieto, que tiene un salario anual de 3 millones 247 mil 441 y 18 centavos.

El excandidato de Morena, por su parte, recibirá solamente 1 millón 298 mil 976 pesos. Así mismo, no contará con percepciones extras, salvo las que todo trabajador tiene derecho por ley, como el aguinaldo, pero este está incluido dentro del monto total.

Este es uno de los puntos más representativos, de su plan de austeridad, pues al mismo tiempo que se harán reducciones a todos los funcionarios públicos que perciben más de 41 mil pesos, estos tendrán dentro de su salario anual el total de percepciones extras.

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Es decir: ahora, todo político y funcionario tendrá dentro de su salario dietas, gastos de viaje, aguinaldos, premios, bonos, comisiones y demás figuras que utilizan para no gastar su salario, sino partidas presupuestales de las cámaras o los diferentes niveles de gobierno.

Así mismo, López Obrador había aclarado que no utilizará guardaespaldas ni gente del EMP (organismo que pretende incluir al ejército), y tampoco los funcionarios tendrán derecho a guardias de seguridad privados por parte del Estado, estos solo serán asignados a quienes laboren en temas de seguridad, los demás tendrán que contratarlos por su cuenta si los quieren.

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Por supuesto, dentro de este plan está también la eliminación de pensiones a expresidentes y la venta de la flotilla de aviones y helicópteros designados para el traslado de funcionarios (se conservarán todos los que son de dependencias de seguridad y defensa).

También está especificado que no se podrá emplear a familiares, por lo que si tenías la esperanza de conseguir chambita por tu tío que trabaja de abogado en la SSP, lo sentimos mucho, será para la otra… o en otro lado, donde estés calificado para esa labor.

Al parecer, también estas medidas incluyen asuntos de baja magnitud, como no comprar equipo de cómputo el primer año de gobierno y también que no se puedan realizar fiestas ni beber licores dentro de oficinas de gobierno.

Una de las críticas más fuertes hacia el gobierno de Peña Nieto fue el gasto que se hizo en publicidad oficial, que año con año aumentaba y rebasó, por mucho, el aprobado. A esto, AMLO propone que se reduzca a la mitad ese gasto, pero no sabemos si habla del efectivo o del aprobado.

Muchas de estas medidas parecen ser de bajo impacto y buena voluntad, como las que limitan los gastos en telefonía celular y en ropa para protocolos; o no comprar muebles de lujos para oficinas; cuidar el mobiliario existente o tratar a la gente con amabilidad (sí, eso es una medida para austeridad).

Con información de Aristegui Noticias

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