El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no se ha cansado de mostrar su xenofobia. Esta vez, habló sobre la colaboración entre México y su país, de la que explicó solamente puede ser económica, porque en la frontera “no nos ayudan en nada”.

Esto, claro, en relación al tema migratorio. Después, soltó una de sus más grandes expresiones racistas y xenófobas, al asegurar que los mexicanos que acceden a Estados Unidos:

no son personas, son animales. Tenemos a gente que entra al país, que ustedes no lo creían, lo malos que son. No son personas, son animales” (Vía: El Universal)

Después, se comprometió a expulsarlos del país lo más pronto posible, como ha dicho desde que entró a la presidencia. Trump considera que la política migratoria que buscó dejar Barak Obama es la “más estúpida del mundo”, por eso de querer respetar derechos humanos, seguramente.

Al mismo tiempo que esto sucedía, el Departamento de Estado de EEUU, anunció que está llegando a un acuerdo con el gobierno mexicano para que los integrantes de la Caravana Viacrucis Migrante tengan asilo… en México y no solo esos, sino también los 93 mil casos que el departamento de migración estadounidense tiene sin resolver. (Vía: Reforma)

Esta semana, Luis Videgaray estuvo en Washington buscando fortalecer la relación entre ambos países, de cara a la renegociación del TLCAN, que está entorpecida por las mismas razones que todo actualmente en el país: la figura de su presidente.

La decisión y el anuncio del Departamento de Estado va en función de las mismas declaraciones del presidente. El no poder reconocer en cualquier ser humano la característica de ‘humano’ o ‘ciudadano’ simplemente demuestra la intención clara de un gobierno a cerrar sus fronteras de manera indiscriminada.

YouTube video

Los ataques de Trump no han sido solo hacia la comunidad latina, también hacia los musulmanes y árabes, y cualquier persona que no sea caucásica y de origen racial europeo.

La mayoría de los migrantes que cruzan México, no pretenden quedarse en el territorio nacional. Sin embargo, ante la negativa de Estados Unidos de siquiera revisar las peticiones de asilo, parece que tendrán que solicitarlo a México, donde tampoco hay condiciones posibles, ni social ni administrativamente, para asegurar que serán aceptados como residentes temporales.

Amicus Humani Generis