Masajista abusó de clienta, asegura que pensó que los gemidos de dolor “eran de placer”
Vaya forma de querer salirse con la suya.
Graham Stannard, un masajista de 47 años, ha sido acusado de abuso sexual… pero en su defensa aseguró que tuvo el consentimiento de su víctima porque creyó que ella gemía “de placer”. WTF.
Stannard abusó de una chica en su consultorio al sur de Londres, en Gran Bretaña, en agosto de 2020, cuando la joven, de 25 años, reservó una cita con él después de leer múltiples reseñas positivas de su tratamiento, como narra The Mirror. Sin embargo, desde un principio todo se tornó oscuro.
A su llegada al consultorio, Stannard la recibió haciendo comentarios sobre físico. Le dijo que tenía una “bonita sonrisa”. Posteriormente, cuando comenzó el masaje, le dijo: “Es muy agradable que estés haciendo esos ruidos. Me gustaría escuchar más“.
“Me pidió que me diera vuelta”, relató la joven. “Estaba topless y él se veía emocionado, feliz, con los ojos bien abiertos. Él dijo: ‘tienes un cuerpo increíble’, estaba extasiado. Pensé que haría algo peor”.
Foto: Shutterstock
La joven mencionó que sus quejidos durante el masaje fueron provocados involuntariamente porque Stannard tocó su dolorosa ciática, una zona que tenía inflamada debido a un nervio irritado, pero el masajista ocupó eso como una excusa para abusar de ella.
“Habiendo encontrado una cliente por la que sentía que había algún tipo de atracción física”, dijo el juez John Lodge, “(Stannard) eligió aprovechar la posición en la que se encontraba para agredirla sexualmente. Subió bajo la apariencia de un masaje en una pierna y tocó sus genitales desnudos. Hizo lo mismo cuando le masajeó la otra pierna”, sostuvo.
Stannard, que ahora trabaja como repartidor de Amazon y Uber Eats, recibió veintiún meses de prisión, tendrá completar un programa de rehabilitación de delincuentes sexuales, además de 30 días de una “actividad de rehabilitación”, como señala el Daily Mail. También deberá pagar 800 dólares para compensar las sesiones de psicoterapia que requirió su víctima.
Stannard cuenta con una Orden de Prevención de Daños Sexuales que le impedirá ejercer su profesión durante al menos 10 años.
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