La Universidad Queen Mary de Londres ha desarrollado una forma no invasiva de detectar cáncer cervicouterino: muestras de orina y vaginales. Las mujeres podrían tomar sus propias muestras sin la necesidad de acudir a un laboratorio en una primera instancia.

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El cáncer cervicouterino es el cuarto más frecuente para las mujeres en el mundo. Se estima que en 2018 hubo 570,000 casos de cáncer cervical y, ese mismo año, 310,000 mujeres murieron por la enfermedad. El virus del papiloma humano es la primera causa de este tipo de cáncer.

En el estudio, dirigido por la Dr Belinda Nedjai, las mujeres afirmaban sentirse más cómodas realizando su propio análisis que acudiendo a hacerse estudios.

El proyecto se basa en un análisis del clasificador de metilación S5. Nedjai sostiene que a partir de estas muestras se busca que las mujeres asistan con más frecuencia a revisión, una vez que obtengan un resultado parcial. Por lo tanto, también se espera que este trabajo reduzca el costo de los análisis médicos y mejore la calidad de la atención brindada.

El análisis del S5 busca los cuatro tipos de VPH más asociados con cáncer (VPH16, VPH18, VPH31 Y VPH33) y el gen EPB41L3 para encontrar el nivel de riesgo. Entre más alto sea el resultado, hay una mayor posibilidad de que haya cáncer. El análisis es 100% preciso al detectar cáncer ya existente y 93% preciso al detectar pre-cáncer en mujeres que han salido positivas de VPH.

El cáncer cervicouterino comienza con un crecimiento anormal de células en la superficie del cérvix. Este crecimiento tiene tres etapas (CIN1, CIN2, CIN3) donde cada etapa aumenta la posibilidad de contraer cáncer.

Para el estudio, 620 mujeres presentaron muestras vaginales y 503 muestras de orina. Con estas pruebas se pudo diagnosticar a personas que no tenían lesiones de cáncer y personas que estaban en la etapa CIN3.

Actualmente se está trabajando para mejorar la precisión del análisis. Se espera que en un futuro estas muestras las puedan tomar las mujeres en casa para después decidir si ir o no a la clínica de salud más cercana.

Con información de Queen Mary University of London.