La periodista deportiva Vanessa Huppenkothen caminaba por la calle cuando de pronto avistó a un “chingón”, como ella mismo lo describió, al que decidió tomarle una fotografía y compartirla en sus redes sociales para expresar su admiración por la persona.
“Me encontré con un chingón en la calle!”, escribió la conductora de televisión junto a una fotografía que muestra a una persona con muletas y una pierna amputada mientras carga sobre su espalda una mochila de repartidor de comida.
Me encontré con un chingón en la calle! pic.twitter.com/y76f99Sh3J
— Vanessa Huppenkothen (@vanehupp) July 21, 2022
Aunque quizá la intención de la periodista solo era resaltar la admiración que tenía por una persona con discapacidad que trabaja como repartidor de comida, sus seguidores le hicieron un crudo recordatorio: que no está bien “romantizar” la precariedad laboral en México. “Romantizar la precariedad laboral en una narrativa de superación es lamentable y repugnante”, le respondieron.
“No dudo que sea un chingón pero qué pinche afán de romantizar estas situaciones. Cuándo nos vamos a cuestionar si es correcto que una persona sin una pierna trabaje de repartidor… caminando!”, le contestó uno de sus seguidores, a lo que ella respondió: “Entonces soy una romántica porque yo lo admiro y se me hace un ejemplo de superación”, escribió la periodista desde su iPhone.
La publicación de Huppenkothen, con más 35 mil me gusta y de 4 mil comentarios, se llenó de reclamos y hasta mensajes de odio en contra de la periodista… sin embargo muchos de las respuestas que recibió también un recordatorio de la realidad de los trabajos en México, una situación que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y del Observatorio de Trabajo Digno, ha sido bastante persistente desde el 2005 hasta el día de hoy.
Según los datos recabados por la iniciativa Acción Ciudadana Frente a la Pobreza siete de cada diez personas trabajan en el país sin posibilidad de superar el umbral de la pobreza, lo que representa el 71.4 por ciento de la población. Además de que seis de cada 10 trabajadores (61.2 por ciento) no cuentan con afiliación al Seguro Social.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI reveló que en 2022 se registró un aumento de 602 mil hombres que se incorporaron a los sectores informales, como podría ser el caso del repartidor de UberEats, algo que Acción Ciudadana Frente a la Pobreza ha catalogado como “un desastre que se ha ‘normalizado’” y que no solo deriva en bajos salarios, condiciones críticas de ocupación y por ende pobreza.
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