Ayer en conferencia, la PGJ-CDMX presentó una serie de videos de las 54 cámaras de vigilancia de las autoridades, así como de plazas comerciales y tiendas de autoservicio, que presuntamente muestran a Marco Antonio Sánchez mientras deambulaba por calles de la zona metropolitana.

De acuerdo con las grabaciones, Marco Antonio fue capturado en la estación de Metrobús El Rosario a las 16:34 del 23 de enero pasado. El Procurador Edmundo Garrido Osorio dijo que el joven fue liberado 10 minutos después a unas cuadras del lugar, pero declaró que no cuentan con videos de ese momento.

Las cámaras de la patrulla a la que subieron a Marco no servían. Según el Procurador, el desperfecto se reportó desde noviembre pasado.

https://twitter.com/PGJDF_CDMX/status/960673647475097600

Aunque aún no hay videos que prueben que los agentes que detuvieron a Marco Antonio lo hayan golpeado, la Procuraduría tiene pruebas de que su detención no solo no estuvo apegada a los protocolos, sino que fue ilegal y con exceso de fuerza.

El no haber activado protocolos de detención para un menor de edad, no haber avisado a sus padres, faltar a la cadena de mando, no reportar de inmediato lo sucedido y liberarlo en la calle, son parte de los indicios en contra de los policías.

Los agentes que están siendo investigados son Martín González Martínez, Ricardo Trejo, Ubel Mora Gallardo y Juan de la Rosa Guzmán. Los dos últimos también están siendo investigados por la Secretaría de Seguridad Pública por dos operativos en los que se reportaron abusos e incursiones a domicilios sin una orden judicial. (Vía: Reforma)

Aún falta aclarar por qué Marco Antonio apareció golpeado y narcotizado, condiciones por las que aún se encuentra en el hospital. La PGJ anunció que parte de la investigación se llevará al Estado de México para determinar dónde estuvo durante los seis días que estuvo desaparecido.


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