Dos años y 11 millones después, los silbatos antiacoso no se han usado ni una vez
El Sistema de Transporte Colectivo Metro, a través de una solicitud de transparencia hecha por Reforma, confirmó que no existen reportes de que los silbatos antiacoso o #ViveSegura repartidos por...
El Sistema de Transporte Colectivo Metro, a través de una solicitud de transparencia hecha por Reforma, confirmó que no existen reportes de que los silbatos antiacoso o #ViveSegura repartidos por el Gobierno de la Ciudad de México hayan sido usados una sola vez. Esto a dos años de la implementación del programa y 11 millones de pesos invertidos en él.
“No se tienen reportes de usuarias que hayan utilizado los ‘silbatos rosas’ repartidos por el Gobierno de la Ciudad de México”, señaló el STC.
En 2016, el entonces Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera habló de la iniciativa de “silbatos rosas” como una medida que reduciría el acoso en el transporte público. Sin embargo, la única forma de medir el “éxito” de los también llamados “pitos de Mancera” fue a partir de los silbatos entregados.
Como parte de las estrategias para inhibir el #AcosoSexual, personal del STCMetro continúa haciendo entrega del silbato #ViveSegura en #Ferrería #L6. Solicita el tuyo. pic.twitter.com/w7V5nLnSE7
— MetroCDMX (@MetroCDMX) September 14, 2018
De acuerdo con Reforma, cada uno de los silbatos tuvo un costo aproximado de 70 pesos. Fueron entregados en estaciones del Metro con alta afluencia como Balderas, Chabacano, Chapultepec, Pino Suárez, Guerrero, Pantitlán y Zócalo, así como en estaciones del Metrobús y en oficinas del Instituto Nacional de las Mujeres.
No obstante, como revela el informe, son pocas las mujeres que tienen un silbato #ViveSegura en su poder y muchas menos las que le han encontrado alguna utilidad.
El pito de Mancera solo fue una leyenda urbana o qué? Porque sí eran una idea inútil, pero casi nadie consiguió uno
Dónde quedaron? Qué se hizo con el dinero que se había destinado para los silbatos?— Mariana (@desiertomar) September 16, 2018
Desde 2016, un informe realizado por Ala Izquierda, Equis Justicia para las Mujeres, GIRE y ADSYR concluyó que el programa de los silbatos antiacoso fue “mal planeado”, “mal ejecutado” y sin resultados. En 2018, a dos años de su implementación, los “pitos de Mancera” aún son entregados de la misma forma: sin estrategia ni seguimiento.
Mientras tanto, el acoso en el transporte público de la Ciudad de México sigue siendo un grave problema: más de la mitad de las mujeres que lo usan han sido acosadas sexualmente y las acciones afirmativas implementadas, como los vagones exclusivos para mujeres, niños y niñas, no siempre son respetadas.