La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México informó que la salud del Líder Comandante Supremo, el gran monito capuchino sigue mejorando: subió de peso, quedó libre de parásitos y ya hasta está ligando con una monita. Sólo que presenta un problema (y uno muy chilango): está en riesgo de padecer diabetes.
Dicen que estoy más sano y más bonito, pero mi corazón está triste porque me quitaron los bolillitos. #SendBolillos https://t.co/9M82COzfLD
— #MonoCapuchino (@monodelaslomas) May 10, 2018
Todos sabemos que el ritmo noticioso ha hecho a media ciudad olvidarse de la mejor noticia que le ha ocurrido a la CDMX en su historia, pero en la mesa de redacción de Plumas Atómicas tenemos un altarcito al mono capuchino y veinte alertas para enterarnos a cada momento de cómo sigue nuestro prófugo favorito.
Desde que nuestro héroe cayó en manos del Sistema y fue recluido en el Zoológico de Chapultepec (matando nuestros sueños anarquistas con ello), lo que sea de cada quien ha mejorado. Según los veterinarios a su cargo, ha subido 800 gramos, lograron desparasitarlo por completo y, aunque sigue en cuarentena, ya le echó ojos a una monita vecina. (Vía: Aristegui Noticias)
Después de haber pasado días comiendo bolillitos de la caridad, le cambiaron la dieta a una que envidiaría cualquier vecino de la Condesa: huevito duro, apio, ejotes, lechuga, chayote y manzana. Lo que preocupa ahora es que, de acuerdo a los exámenes de orina y sangre, tiene riesgo de padecer diabetes, debido a la aparición de glucosuria en sus análisis.
Todavía recordamos con cariño los días completos que pasamos echándole porras al monito para que nunca lo atraparan… pero, como tus sueños de la secundaria, tenían que terminar. (Vía: Excélsior)
Según las últimas encuestas, la intención de voto por el mono capuchino ha crecido en todo el país, como lo confirmamos el día del debate por la CDMX. Querido monito capuchino: resiste y lucha, luego te llevamos unos bolillitos del amor.