Durante mucho tiempo se ha dicho que los abortos causan traumas emocionales y psicológicos a las mujeres, es el argumento que siempre se ha utilizado para no permitirlo.
Un nuevo estudio realizado en Estados Unidos desacredita la afirmación de que las mujeres que recurren a los abortos desarrollen problemas mentales. Los investigadores se dieron a la tarea de seguir durante 5 años a mujeres que buscaron abortar en varios puntos del país y encontraron que aquellas que se sometieron al procedimiento no experimentaron depresión, ansiedad, baja autoestima ni insatisfacción con la vida. (Vía: The New York Times)
Los resultados de este estudio llegan en momentos en que el debate sobre los abortos se ha intensificado en Estados Unidos, debido a que el candidato electo, Donald Trump, postuló a la Suprema Corte un juez que se opone al procedimiento.
Los resultados de la investigación, publicados en JAMA Psychiatry, también mostraron que solo las mujeres a quienes no se les permitía abortar presentaban efectos psicológicos adversos porque el tiempo de su gestación superaba los límites. Sin embargo, su angustia no duraba mucho, tanto si acudían a la clínica como si decidían tener al bebé.
La especialista en bioética en la Escuela de Medicina Feinberg de la Northwestern University, Katie Watson, aunque no participó en el estudio, expresó que “este estudio nos habla de la resiliencia [capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas] y de la gente que trata de sacar provecho de sus circunstancias y seguir adelante”, y añadió que “la gran revelación, es lo ordinario que esto es”. (Vía: The New York Times)
Es importante resaltar que este estudio realizado por la Universidad de California en San Francisco evitó los errores metodológicos de análisis previos, como el de comparar a mujeres que abortaron con mujeres que al final decidieron tener al niño.
Sin embargo, Randall K. O’Bannon, integrante de la asociación provida National Right to Life, consideró que existen mujeres que experimentan problemas psicológicos después de 5 años de practicarse una aborto: “El estudio no abarca a las mujeres que tuvieron esas experiencias 10 años después. Hay quienes pasan por traumas severos, ansiedad, depresión, pensamientos suicidas”. (Vía: The New York Times)