Tras casi cinco años de viaje, este martes 5 de julio la sonda espacial “Juno“, perteneciente a la NASA, llegó por fin a Júpiter, el planeta más grande del sistema solar.
Right on, @NASAJuno! Congrats on getting into orbit around #Jupiter. Let us know what's under those clouds. pic.twitter.com/OTu5LLQfX6
— NASA Voyager (@NASAVoyager) July 5, 2016
La nave creada por la NASA, logró con éxito ser aspirada por la órbita de Júpiter, después de una riesgosa maniobra que duró 35 minutos y que consistió en frenar sus motores hacia abajo. Superada la misión, los ingenieros de la NASA, en su sede ubicada en Pasadena, California, festejaron entre abrazos llenos de júbilo.
Ahora, ya dentro de Júpiter, la nave dará 37 vueltas antes de estrellarse contra su superficie. La nave recorrerá este planeta por 20 meses, y no sólo dará información respecto a cómo se creó el planeta gaseoso más grande del sistema solar, sino que también servirá para descubrir más del espacio y de lo que sucede fuera de nuestro sistema, ya que según los investigadores, este planeta guarda los secretos que develan cómo se formaron elementos como el agua, helio, metano e hidrógeno.
Además, Juno tomará las imágenes con mayor resolución que alguna vez hayamos visto de Júpiter, pues operará en el corazón de los cinturones de radiación de este planeta. Cabe recordar que Júpiter tiene más de 60 lunas, posee una masa inmensa y su movimiento de traslación dura 10 horas; lo que hace que su campo magnético sea de una extrema, y hasta peligrosa, fuerza.
Juno lanzada al espacio el 5 de agosto de 2011, se trata de una sonda no tripulada, impulsada por energía solar y que tiene el tamaño de una cancha de basquetbol (es decir, 28×15 metros). Luego de cuatro años y once meses de viaje, ésta se ha convertido en la nave que más lejos ha llegado en el espacio; 10 veces más cerca de las nueve sondas que previamente visitaron Júpiter.
Todo el proyecto completo ha tenido un costo de más de 1,100 millones de dólares.